Todo vuelve...

Hoy me tome el día libre o algo así más o menos. Dormí hasta tarde, vi revistas, vi televisión. Me eché al pie de mi cama, en el suelo, a escuchar la radio. Y con los pies apoyados en la cómoda empecé a descansar de todo. No pensé en nada ni en nadie. Es bueno a veces, simplemente, no pensar en nada y disfrutar del momento. Hay días en los que se quien soy con exactitud. Otros me encuentro totalmente perdida. En esos días quisiera tener una capa que me haga invisible. Y así poder salir del lugar en el que me encuentro y escapar. Al igual que en mis sueños. No quiero que me encuentren, no quiero que me encuentres. No quiero verte tampoco. En los sueños siempre me haces llorar y en un ambiente cerrado no puedo respirar tranquila. Me siento incomoda. Te siento falso. Indiferencia es la palabra clave, siempre todo vuelve. Y hoy a pesar que descanse, me encuentro confundida otra vez.